Magdalena Camargo Lemieszek

a R.M. Ahora friego compulsivamente las cucharas. Una y otra vez vuelvo a la misma, restriego, bruño, enjuago. Hundo la esponja en la parábola plateada, sostengo el mango con firmeza. Repito de memoria ese poema que escribiste para mí hace diez años. No es un poema realmente, pero para mí es como si un pescador…

Hay una foto, una instantánea polaroid, en la que estoy sobre un elefante de circo. Debía tener unos cinco años, un trajecito de jeans, mi cabello castaño rizado y una sonrisa que no cabía dentro de la foto. Yo era demasiado joven entonces para decidir o entender la crueldad, los grilletes, el agrio y el…

Yo apenas empezaba a vivir la segunda década de mi vida, era una muchacha todavía, pero ya había estado en los jardines de la Alhambra, palpado sus columnas, escuchado un alúd antiguo en el agua de sus fuentes, presentido la edad en el azul lapislázuli de sus mosaicos. Incluso fue ahí donde vi una exposición de…